La Importancia de Prestar Atención - Evitar la Conducción Distraída

Tu capacidad para enfocar tu atención total y consistentemente en el escenario alrededor de tu vehículo es igual de importante que tu conocimiento de reglas de carretera y tus habilidades de control del vehículo. Prestar atención al conducir es una habilidad importante que muchos pasan por alto al aprender a manejar.

Sin importar lo “bueno” que seas como conductor, nunca serás un automovilista realmente seguro y responsable si no puedes mantener una imagen precisa de lo que sucede en el entorno de la carretera. Debes crear el hábito de prestar atención desde el momento que entras al vehículo y continuar reforzándolo por el resto de tu vida de manejo.

Si tu atención se desvía de la tarea de conducción, por cualquier espacio de tiempo, podrías dejar de ver datos importantes de la carretera como peligros que se aproximan, las comunicaciones de otros conductores y los dispositivos de control de tráfico que cambian. Sin esta información no podrás tomar decisiones de manejo seguras y apropiadas.

Estar preparado para el acto físico de conducir no es suficiente para evitar accidentes y colisiones. ¡A menos que solo conduzcas en un área de estacionamiento! Las situaciones de manejo de la vida real están llenas de riesgos complejos y cambiantes que requieren de ajustes continuos a tu comportamiento de manejo. Para ser un conductor más seguro, debes dominar el acto mental de conducir, que implica hacer multitareas, interpretar datos visuales e implementar un buen juicio. Nada de esto será posible si no pones tu atención en la carretera.

Usar tus habilidades mentales y visuales

Un conductor atento siempre modificará la ubicación de tu vehículo para crear una línea de visión clara, utilizando ese camino visual para examinar la carretera en busca de peligros y cambios en la condición de la carretera que pudieran requerir ejecutar una acción. Obviamente, esto implica cierto nivel de “habilidad visual”, ya que debes tener buena vista y la capacidad de mover tu mirada alrededor de la carretera sin ver fijamente solo un punto.

Más aún, ser un conductor atento exige habilidades mentales. Tus procesos mentales esenciales como la cognición (la capacidad de percibir eventos), el razonamiento (la capacidad de darle sentido a lo que ves) y la toma de decisiones (actuar según lo que observas para aumentar la seguridad) se deben enfocar en el acto de conducción. Esto requerirá de disciplina mental y emocional.

Desarrollar la actitud correcta

Evitar conflictos, accidentes y colisiones al conducir conlleva una actitud responsable y bien definida. Los conductores con la actitud correcta se distinguen por las siguientes características:

• Están preparados para ceder el derecho de paso cuando sea adecuado o si la seguridad así lo requiere.
• Son conocedores de las reglas de carretera, señales de tránsito y técnicas de manejo defensivo.
• Tratan a los demás usuarios de carretera como les gustaría que ellos los trataran.
• Pueden diferenciar entre decisiones seguras e inseguras.
• Eligen no conducir si no están bien física o mentalmente o se encuentran fatigados.
• Tienen estabilidad emocional y no muestran enojo ante los errores de otros conductores.
• Son pacientes, tranquilos y metódicos en situaciones de manejo estresantes.
• Siempre prestan atención a la tarea de conducción.

Un conductor verdaderamente responsable con la actitud correcta cumplirá todos los enunciados de esta lista de forma consistente, sin excepciones. No tendrás la actitud correcta si tratas con cortesía a los demás conductores solo cuanto te parezca bien o si prestas atención a la carretera solo cuando no haya distracciones.

Si mentalmente no puedes prestar atención por completo a la carretera debido a una angustia emocional, una lesión física, un pasajero que te interrumpe o alguna otra situación, no manejes.